El advenedizo candidato
republicano Donald Trump, ha dicho de todo y esa irrefrenable locuacidad ahora
le está pasando factura. Pero, admitámoslo, Donald es un muy suigeneris
empresario acostumbrado al éxito pero sin tener muy en cuenta ciertas
convencionalidades del mundo empresarial, pero, al margen de esas
consideraciones, si vamos a juzgar por los resultados nadie puede negar que el tipo
es un visionario ¨de los negocios¨ y un ganador.
CLINTON, LA GENESIS DE LA
CRISIS
Justamente guiado por esa lógica
pragmática se echó al ruedo de la carrera política y derribó a una retahíla de
candidatos sin talento y lo hizo en una circunstancia política muy particular. Ambos
partidos, tanto el demócrata como el republicano pasan por una crisis
acumulativa expresada tanto en la base como en el electorado general, no tanto
por la retórica, que para todos los fines prácticos es siempre, esencialmente
la misma porquería, las mismas engañifas cada cuatro años, sino por la añoranza
de épocas rancias, por la reminiscencia de aquellos tiempos de la bonanza de la
post guerra, y sobre todo del pasado reciente, cuando la administración Clinton,
en también una época muy definida a nivel internacional ¨produjo¨ un increíble milagro
económico que dejó como resultado un superávit económico que, al cambio de administración
Clinton a Bush,
levantó un debate bastante bizarro entre los estamentos de decisión política americana.
Este extraño debate, alrededor del mundo y sobre todo acá en América Latina
generaba asombro y mucha perplejidad, discutían si enviarle a cada
contribuyente un cheque o si utilizarlo para otros fines del estado, algo
sencillamente impensable y surrealista en estas tierras bananeras.
Pero, lo que la mayoría de
la gente no sabe, es que, de hecho, lo mejor que le pudo pasar a Bill Clinton y
al partido Demócrata en conjunto es que Al Gore no ganara las elecciones, pues,
al margen de todas las barrabasadas hechas por la administración Bush y sus
guerras de cruzadas y los planes de la elite y cuantas estupideces podamos
mencionar, la realidad es que la gestación de la debacle en la que cayó la economía
americana no se gestó en el periodo de Bush, sino que fue incubada por los
estrategas clintonianos ayudados al final por la incompetencia de la administración Bush
y se precipitó como el mazo de Thor sobre los Estados Unidos y una vez más sobre
el resto del mundo. Y si lo dudan, hagan memoria sobre cuales fueron los
resultados de las políticas neoliberales impulsadas por Clinton en todo el
mundo y sobre todos sus efectos desestabilizadores en toda América Latina,
conducentes a la caída de casi todos los gobiernos de derecha en la región y el
subsecuente surgimiento de gobiernos de izquierda en todo el hemisferio.
Así que Trump y en alguna
medida Sanders, aprovechando la ausencia de un discurso capaz de conectar con
un electorado hastiado de los mismo se han beneficiado de ese desencanto, pues
a la gente no le interesa en realidad el discurso, sino EL CAMBIO, y es
evidente que el pueblo americano está preparado para emitir un voto de castigo,
no para destruir sus fundamentos como nación, y eso, tú Trump, debes entender
muy bien, sino para mandarle un sonoro
mensaje al establishment en la única forma en que lo pueden hacer, valiéndose de
la trampa de la llamada democracia, y no olvides que la democracia de tu país,
es también muy suigeneris, pues el pueblo vota y un grupo secreto de una logia,
que nadie conoce, es quien decide al final del día, quien será el presidente,
en otras palabras, un sistema diabólico, concebido desde el principio para dar
una apariencia de democracia, pero que es, para todos los fines prácticos un
descarado sistema de control.
Pero Trump, debes
entender, que una cosa es con guitarra, y la otra es con violín. Cuando un
hombre enamora una mujer hay una etapa de cortejo en la que todo da risa y casi
toda acción es bienvenida, pero, cuando acaba la etapa del cortejo se pasa a
hablar de temas más serios y esos temas, también se hablan con un porte más
serio, eso se llama coherencia; y aquellos
que van a asumir el compromiso, (la novia y los padres de esta) de forma
natural esperan un cambio en la retorica y sobre todo en las acciones. En este
punto crucial, si cuando al novio se le habla, por ejemplo, de cuáles son los
medios económicos de los que se valdrá para mantener a la prometida? dónde van
a vivir? y cosas por el estilo, resulta en una mala, sino desastrosa señal el
que el novio continúe bromeando e intentado hacer reír a la novia y a la
familia.
Trump, es tiempo de pasar
a tratar los temas serios.
Es momento de dejar de ser
la estrella del Show y dejar de hablar de que eres un ganador y todas esas patrañas,
eso estaba bien durante el cortejo, ahora, tienes que asesorarte bien sobre el único
verdadero tema que le interesa al pueblo norteamericano…..SU BOLSILLO.
Dile a los norteamericanos
que Obama se paso 4 años diciendo que los sacaría
de la pobreza y que eso no ha
sucedido, y que pidió 4 años más para tratar de cumplir lo que no cumplió esos
primeros 4 años y que tampoco cumplió y que por tanto el pueblo norteamericano
no debe caer en la misma trampa dándole a Clinton la misma oportunidad. Ah, por
cierto, antes de hablar de pobreza, asegúrate bien de entender que es la
pobreza, visita muchos de esos getthos de miseria que ahora pululan en los
Estados Unidos, pon el oído y el corazón, ah, por supuesto, y no lo hagas en
traje!, ve sencillo y humilde, pon el oído en el corazón del pueblo para que
puedas hablarles al corazón, gánate a los pobres, que eso es lo que más hay hoy
día en tu país, pues no hay cosa más ridícula que un rico indiferente hablando
a los pobres; la superficialidad de ese tipo de gente se les ve por encima de
la ropa, no hagas tú lo mismo.
Dile al pueblo norteamericano
que no hay tiempo que perder. REPITELES ESO UNA Y OTRA VEZ. Deja la retórica de
barricada, no conseguirás nada con eso, no vuelvas a mencionar el tema del
maldito muro ese, total, cuando un presidente gana hace eso mismo, lo que le da
la gana, entonces…. Para qué seguir fastidiando con ese jodido tema. A quienes querías
convencer con ese tema, ya los convenciste, y lo mismo con el jodido tema de
los latinos, las prostitutas y todo lo demás. Húyele a quienes te quieran hacer
volver a caer en esos temas, húyeles como el diablo a la cruz.
Haz la tarea y muéstrale a
la gente que eres perfectamente capaz de darle al pueblo lo que espera de un presidente
de la nación más poderosa del mundo: porte, decencia, perspicacia dominio
propio, habla de la economía, de la economía, de la economía, evade todas las
provocaciones, entrénate, disciplínate, enfócate, haz mimos con tu equipo como
lo hace buen abogado con su defendido ante los posibles ataques de su cruel
oponente, y dedícate sabiamente, (sin convertirla en una víctima) a azuzar las avispas
entorno a tu oponente, que tiene bastante tela por donde cortar.
Por último, no te alíes
con los grupos minoritarios, simplemente muéstrate conciliador y a ningún grupo
minoritario le hagas promesas especificas ni les muestres adherencia ideológica,
NO LO HAGAS, para que no te jodas. En cambio, gánate a los cristianos, que no
son una minoría, si gánate, a los cristianos, que en tu país son muchos
millones, si logras dar un mensaje aunque sea mínimamente coherente con la fe
cristiana y tienes un mensaje económicamente solido, habrás asegurado tu
presidencia, pues no olvides que la mayoría de los latinos a los que has
denostado, de hecho, son cristianos, escúchame y te ira bien.
Desconfía de todo el
mundo, porque, el sistema está en tu contra, sin embargo, no te rodees de
aduladores y gente incapaz de decirte la verdad, así es muy fácil gobernar con
lamebotas (aquí les decimos lambones simplemente) porque si no eres lo
suficientemente inteligente para elegir tu equipo, estarás pagándole altas
sumas de dinero a la misma gente que está allí contratada por Satanás para que
te hundan, oye mi consejo y te irá bien.
