Juan Alberto Galvá Editor |
Pensar que la tecnología que llevó al primer hombre a la luna no era
superior a la contenida en nuestros teléfonos inteligentes de hoy día parece
dejarnos muy desconcertados. La forma vertiginosa en cómo ha ido creciendo la
tecnología del almacenamiento de datos es sorprendente. La versatilidad, la
portabilidad y la inmediatez con que podemos manejar la información hoy día es
sencillamente sorprendente.
El primer dispositivo moderno de almacenamiento lo constituyó el
disquete, que como era habitual en los años ochenta, era gigante, luego se
empezaron a producir versiones más reducidas del mismo, pero, aunque mejoraron
significativamente la capacidad de almacenamiento, igualmente eran un imán para
los virus. Entonces vimos la llegada del CD, y posteriormente del DVD, ambos
dispositivos mejoraban sustancialmente el problema de los virus e igualmente
dejaban y dejaron obsoletos a los disquetes que hoy día son ya objetos de museo.
La tecnología siguió avanzando y ya contamos con las memorias USB, de
todos los tipos y todas las clases, las memorias USB han significado una
ventaja tanto en el almacenamiento como en la portabilidad, podría decirse que,
su mayor beneficio, ya que, al igual que los disquetes son susceptibles de ser invadidas
muy fácilmente por virus. La capacidad del almacenamiento de las mismas es
altamente superior. Pero, para aquellos con necesidades especiales, de
almacenamiento, léase, video, imágenes, o backup de sistemas, deben recurrir a la última línea de fuego de los acumuladores
de datos para “gente y necesidades comunes” se trata de los discos duros
externos. Veamos la siguiente reseña:
“Un disco duro portátil (o disco duro externo) es un disco duro que es fácilmente transportable
de un lado a otro sin necesidad de consumir energía eléctrica o batería.
Desde que los CD-R y CD-RW se han extendido como almacenamiento barato, se ha
cambiado la filosofía de tener el mismo tipo de almacenamiento de disco
intercambiables tanto para almacenamiento como para copia de seguridad o
almacenamiento definitivo. Antes normalmente eran discos magnéticos o magneto-ópticos.
Ahora se tiende a tener el almacenamiento óptico para un uso más definitivo y
otro medio sin discos intercambiable para transporte. Este el caso de las memorias USB y los discos duros
portátiles.
Un disco duro portátil puede ser desde un microdisco hasta un disco duro
normal de sobremesa con una carcasa adaptadora. Las conexiones más habituales
son USB 2.0 y Firewire, menos las SCSI y las SATA. Estas últimas no
estaban concebidas para uso externo pero dada su longitud del cable permitida y
su capacidad Hot-plug, no es difícil usarlas de este
modo.
contenido
A. [ocultar]
D.
3 Protección
|
Principales areas destacables
Los discos duros portátiles se pueden usar fácilmente en múltiples PC
para compartir archivos. Un disco duro portátil permite una programación
automática para respaldo de archivos. Un dispositivo portátil permite archivar
datos rápido y fácilmente.
Estos discos siguen teniendo piezas móviles, tal como los tradicionales,
y por lo tanto están expuestos a fallos por golpes o manejo brusco.
La gran ventaja que tienen hoy en día sobre las memorias flash o
pendrives son la gran capacidad de almacenamiento, pero esta ventaja va siendo
alcanzada poco a poco, y por ello es posible que el futuro está en memorias
flash de mayor capacidad, sin piezas móviles ni complicaciones.
Los discos USB microdrive y
portátiles (2,5") se pueden alimentar de la conexión USB. Aunque algunas
veces no es suficiente y requieren ser enchufados a dos USB a la vez.
Los SCSI y ATA no pueden suministrar corriente para alimentación por lo que siempre requieren un transformador para ellos. Los Firewire se alimentan de la conexión sin problemas.
Los discos duros de sobremesa (3,5") requieren también transformador por su alto consumo.
Los SCSI y ATA no pueden suministrar corriente para alimentación por lo que siempre requieren un transformador para ellos. Los Firewire se alimentan de la conexión sin problemas.
Los discos duros de sobremesa (3,5") requieren también transformador por su alto consumo.
Las capacidades van desde el 2GB de los microdiscos a los miles de GB de los de 3,5".
Lo habitual es que por los menos tengan conexión USB, lo que permite la compatibilidad con casi cualquier
ordenador fabricado después de 1998. Los más actuales
incluyen además conexión WiFi y se denominan
Wi-Drives1
.
Aplicaciones adicionales
El disco duro necesita un circuito impreso y una controladora, para
convertir del formato originario a USB, Firewire, WiFi2
u otro protocolo. A veces además se amplían las capacidades y permite grabar de
una Cámara miniDV directamente y él mismo crea los
ficheros dentro del disco duro.
Pueden ser formateados como cualquier otro disco duro interno.
Otros son discos duros
multimedia player y permiten guardar videos como si fuese un disco
duro normal y reproducirlos conectando una salida de video que llevan al televisor, sin necesidad de ningún otro
aparato añadido y con una menor dificultad de traslado.”
Tomado de
Wikipedia, enciclopedia libre.